Lucía Bellochio, directora de la Diplomatura en Smart Cities

La movilidad está interconectada con las ciudades. Las transformaciones que se dan en la industria del transporte y las nuevas tendencias en la sociedad tienen que ir acompañadas de innovaciones en el urbanismo y en el diseño de las urbes. Dos referentes mundiales en smart sities compartieron su visión de futuro de las urbes en la primera edición del evento de Movilidad organizado por la LA NACION. “En el pasado pensábamos que los coches particulares tenían que dar pautas de desarrollo de la ciudad. Ahora sabemos que hay muchas formas de movilidad, que dependen de las necesidades y condiciones del individuo. Hemos ampliado las posibilidades de cómo movernos y, a la vez, hemos visto en las ciudades cambios que tienen que ver con una coherencia mayor entre transporte y como configuramos las viviendas y la infraestructura”, relató Martha Thorne, decana del IE School de Arquitectura y Diseño de Madrid. La especialista es una estudiosa del tema desde hace años: su pasión por las ciudades comenzó en su primera visita a Nueva York a los 14 años. Además, tiene una maestría de Planificación Urbana por la Universidad de Pensilvania y fue director de los premios Pritzker de arquitectura.

La congruencia entre la movilidad y las necesidades urbanas es un desafío que cada vez más ciudades están encarando. La aparición de innovaciones como los autos autónomos, el carpooling, los nuevos vehículos y la necesidad de las personas de encontrar una multiplicidad de servicios en cercanía obliga a repensar los espacios urbanos.

“No podemos seguir diciendo que hay una zona de oficinas, otra de vivienda y otra comercial. La gente necesita distintos tipos de actividades durante el día y es mas sano si tienen sus necesidades cubiertas muy cercanas”, opinó Thorne haciendo referencia a la necesidad que tiene cualquier ciudad de tener mas diversidad en la charla que mantuvo con Carla Quiroga, periodista de LA NACION.

En ese sentido, para ella los vehículos autónomos son solo una más de la variedad de opciones que se están desarrollando para moverse. Cree que la ciudad del futuro debe tener una mezcla de actividades complementarias y que se debe hacer “una sinergia”.

“Crear espacios en los que evolucionaremos como sociedad”, dijo la especialista e hizo memoria: “el urbanismo era trazar líneas en un papel, con una idea del futuro muy estática. Hoy en día tenemos tecnología, formas de comunicación que nos pueden ayudar a armar un escenario donde puedan ocurrir muchas actividades pero hay que involucrar a todos los sectores de la sociedad: privados, la política y la academia, entre otros”, explicó.

En la misma la especialista Lucía Bellochio, fundadora y directora ejecutiva de Trend Smart Cities. Además, de directora de la diplomatura sobre el tópico en la Universidad Austral y miembro del Grupo de Expertos de U4SSC United for Smart Sustainable Cities-ONU. Desde Polonia, donde vive, Bellochio analizó que “la movilidad es un elemento clave de las ciudades inteligentes, que son un concepto que pone a las personas en el centro de desarrollo, incorpora las tecnologías como herramientas para desarrollo sostenible y mejora la calidad de vida de las personas en las ciudades”. Y afirmó que las características que definen a la movilidad en estas ciudades son: “inteligente, sostenible, conectada, eléctrica, multimodal, compartida y humana”. De esta forma hizo especial referencia a cada una de ellas:

• Movilidad sostenible: Se pone en jaque el modelo de ciudades del siglo pasado, planeadas alrededor del auto y se identifican iniciativas para devolver esos espacios a las personas. Por ejemplo: ciudades libres de autos o slow streets que prohíben la entrada de autos en algunos espacios, o bien reducir la velocidad.
• Micromovilidad: “Se ve un fomento al uso de bicicletas, monopatines y uso compartido. La tendencia se aceleró en la pandemia. Aparecen conceptos como “la ciudad de 15 minutos” o caminables. Se piensa en desarrollar todas las actividades como entremetimiento, estudio y trabajo en un radio de 15 minutos a pie para reducir emisiones de carbono”, explicó Bellochio.
• Movilidad eléctrica: se trata de un camino ya comenzado. Grandes empresas han anunciado planes para el desarrollo de vehículos eléctricos con fecha cierta para una transición total a ese modelo de producción.
• Movilidad compartida: Bellochio contó que hay un interés por generar una convivencia pacífica entre las distintas opciones de transporte en las ciudades, que incluyen autos, peatones, transporte público, monopatines y robots de entrega de productos, entre muchos otros.
• Movilidad conectada: “La tecnología permite hoy conectar oferta y demanda, entrega de productos, dispositivos y nuevos medios de pago. El significado de la movilidad es poder conectar todo. Hay una tendencia en los gobiernos de abrir datos de movilidad, generando nuevas oportunidades para el ecosistema del emprendedor. Se busca tener soluciones tecnológicas al alcance de nuestra mano y personalizadas”, concluyó.