10 de diciembre de 2021
Los alumnos de la Escuela de Gobierno navegaron en la Fragata Libertad
La Armada Argentina invitó a 10 alumnos de la Escuela de Gobierno a navegar en la Fragata ARA “LIBERTAD”. La actividad, que tuvo lugar el fin de semana del 27 y 28 de noviembre, incluyó también actividades en la Base Naval “Puerto Belgrano” el siguiente lunes, en el marco de un Viaje de Instrucción universitario y Seminario de Intereses Marítimos a bordo. Acompañaron la actividad Celina Cantú, Dir. del Master en Políticas Públicas y Jeronimo Morales Rins, profesor de la Escuela de Gobierno y Verónica Carmen Fiuza, Coordinadora Académica de la Diplomatura en Seguridad Internacional y Defensa.
La travesía náutica permitió a los alumnos experimentar por algunos días la vida militar en sus hábitos, instrucciones y actividades de adiestramiento. Imperdibles charlas sobre intereses marítimos, navegación costera, protocolos de seguridad y evacuación, prevención y lucha contra incendios y ejercicios en la cubierta que cobraron una nueva dimensión al ser incorporados en ese contexto.
Con calidez y profesionalismo, la dotación de la Fragata compartió sus conocimientos y experiencias, lo que propició un incipiente espíritu de camaradería y diversión entre todos los viajeros y el personal militar que acompañó en esas singladuras con alegría, dedicación y una vocación de servicio única.
Tras arribar a Puerto Belgrano el domingo por la tarde los alumnos recorrieron algunas instalaciones de la Base, el Arsenal Naval con sus diques y a una visita al destructor ARA “Almirante Brown”, donde conversaron con su tripulación.
El lunes pudieron recorrer la Base Naval en su extensión en un vehículo militar de campaña y maravillarse del genio del ingeniero Luigi Luiggi, quien, comisionado por el visionario gobierno argentino en 1896 para diseñar las instalaciones de la actual Base junto a la Ciudad de Punta Alta, culminó esa magnífica obra en 1905.
La recorrida incluyó la visita al Centro de Instrucción y Adiestramiento en Técnicas y Tácticas Navales (CITT), su Adiestrador Táctico (ADITAC) y el impecable Comando de Adiestramiento y Alistamiento, donde sus autoridades y personal detallaron con precisión las misiones de la Armada en el Atlántico Sur, la cobertura de rescate marítimo y su proyección en la protección de los recursos naturales e intereses de la nación, pese a limitaciones presupuestarias y materiales.
Al llegar a la plaza de armas, la Infantería de Marina esperaba a los visitantes de la Escuela de Gobierno con una muestra estática de los medios con los que cuenta en el área de comunicaciones, guerra química-biológica y nuclear, potabilización de agua, desminado, transporte, cocina de campaña y armamento individual. Más tarde, desde la sede de la fuerza anfibia partieron al centro de adiestramiento en Baterías, donde vehículos Panhard los esperaban para descubrir las baterías históricas junto a la museóloga de esa base. Finalizaron el traslado de regreso por el terreno arenoso de los médanos naturales a bordo de vehículos anfibios a oruga (VAO).
En la Escuela de Oficiales de la Armada (ESOA) con un ilustrativo video y exposición en sus talleres y bancos de pruebas, pudieron entender con más detalle las actividades y desafíos de capacitación técnica para el personal superior. Luego, en la Biblioteca se realizó el intercambio de obsequios institucionales.
Tras un largo traslado a la Base Aeronaval Comandante Espora (próxima a Bahía Blanca), accedieron al Museo Aeronaval, donde un guía apasionó a los alumnos con una recorrida por la historia de la precursora aviación argentina y con conmovedoras muestras del desempeño de las intrépidas escuadrillas aeronavales en Malvinas. En el exterior del museo, junto a los aviones exhibidos, descubrieron una representación de la pista del portaviones ARA Veinticinco de Mayo (V-2) que sirvió en la Armada entre 1969 y 1997.
Más tarde, en compañía del comandante de escuadrilla culminaron la visita en el hangar de los helicópteros Sea King que arribaban de un vuelo de entrenamiento y próximamente aprovisionarán a las bases antárticas argentinas.
“Tan extraordinaria experiencia fue intensa, multifacética, desafiante en lo humano, académica, formativa y nos permitió acercarnos un poco a la desconocida y entregada vida de los militares en el mar, conocer sus roles y tareas, compartir sus inquietudes y admirar su enorme vocación y profesionalismo” expresó Verónica Carmen Fiuza, Coordinadora Académica de la Diplomatura en Seguridad Internacional y Defensa.