La Facultad de Comunicación celebró la entrega de premios de un proyecto para alumnos de colegio secundario. Se trata del World Building Challenge, un desafío de construcción colaborativa de mundos posibles, A PARTIR de problemas reales de la sociedad.

 

La creatividad es un motor del cambio. Así lo demostró el World Building Challenge (Desafío de Construcción de Mundos), un concurso para estudiantes del último año de colegio, que tuvo su gran final el miércoles 20 de octubre en nuestro Campus Austral, con el apoyo de FACIUNI (Festival Académico de Cine Universitario Internacional), Wacom y DirecTV.

En el evento de cierre, los participantes expusieron el resultado de tres semanas de trabajo colaborativo, en las que aplicaron la metodología World Building para pensar un mundo pospandemia, en el año 2030. La jornada terminó con una entrega de premios por los proyectos realizados, en la que los familiares presentes y los alumnos celebraron el desafío logrado.

Gracias al equipamiento del aula híbrida, pudieron asistir de modo virtual y presencial alumnos y profesores de colegios de Buenos Aires, Tucumán y Salta. A su vez, acompañaron la presentación los profesores que moderaron la convocatoria; el equipo organizador y los integrantes del jurado. 

Pero no fueron los únicos en seguir la apuesta creativa. También participaron profesionales invitados que se destacan en el ámbito del diseño y los contenidos creativos. Stefano Carluccio, director regional de contenido y reputación de Responsabilidad Social para DirecTV Latinoamérica; Diana Córdoba, productora ejecutiva de Wacom Tabletas DC•DC! y productora de animación en DC•DC Digital Contents; y Karin Silbert, especialista en ventas y capacitación de Wacom compartieron la jornada con los asistentes.

Eso llamado World Building

Reciben la invitación. Leen el concepto World Building. La curiosidad se activa. Pero ¿qué es?

Es una metodología que permite construir escenarios posibles en el futuro, a través del Diseño, el storytelling y la tecnología, para repensar el presente y promover un cambio en la sociedad.

La técnica fue creada por el diseñador creativo Alex McDowell y requiere la invención de un sistema verosímil, llevado hasta sus últimos detalles. Así es como se llega a delinear desde la geografía y la política, hasta la economía y las reglas sociales de ese hipotético mundo. Y, por supuesto, los personajes que lo habitan y que le van a dar vida a la historia.

Un proyecto desafiante

“Cada equipo deberá realizar un universo de ficción (realista, fantástico o alternativo) en el lugar elegido por ellos (según las opciones disponibles), proponiendo mejoras a los problemas que se presentan en esos mundos, siguiendo cada uno de los pasos fundamentales”.

Con esta frase se encontraron los alumnos participantes del challenge. Y, con esta frase, se lanzaron a la elaboración de un proyecto que les llevaría tiempo, dedicación y mucha, mucha creatividad.

world building challengeLos equipos estaban conformados por cuatro integrantes, con la guía de un profesor. Y, a lo largo de su itinerario, realizaron entregas sobre el mundo diseñado.

The Imagineers, del colegio Los Cerros (Tucumán), planteó un mundo realista, centrándose en la temática de los hospitales de niños en la Argentina. Astroworld, del colegio Latinoamérica (Derqui), diseñó un mundo alternativo en el que la inteligencia artificial gobernara todo. A su vez, Sweet Caos, el segundo equipo del colegio Latinoamérica, propuso un escenario de las islas Galápagos en el año 246.002​, en el que el cambio climático afectaría drásticamente la vida humana sobre la tierra. Women, del colegio Los Cerros (Tucumán) construyó un mundo dominado por un sistema dictatorial de seres tecnológicos. El grupo 1 del Instituto Humanista de la Santísima Trinidad (Salta) abordó el tema de la desigualdad social y proyectó un mundo dividido por la brecha tecnológica. Mientras que el segundo grupo del mismo colegio montó una sociedad gobernada por PANACEA, un sistema de control planetario a través de la inteligencia artificial. Por último, el grupo que se llevó el primer premio fue el de Las Replicantes, del colegio El Buen Ayre (Buenos Aires).

 

Cómo es el mundo ganador

El equipo de Las Replicantes situó su historia en el año 2221, momento de la historia en el que la raza humana estaría en peligro. Al parecer, doscientos años atrás, por una mutación genética, las personas comenzaron a involucionar a estadíos anteriores del ser humano: de Homo sapiens al Australophitecus. En un planeta contaminado y tóxico, los protagonistas de la historia plantean volver a habitar la reserva natural de las Islas Galápagos para iniciar un proceso de armonización del ser humano, en equilibrio con la naturaleza que volverá a su orden natural después de haber cobrado conciencia.

Además de los aplausos, ganaron el primer puesto por haber alcanzado un desarrollo coherente del mundo construido. Y con el triunfo, una tableta Wacom y una bonificación para realizar el curso de ingreso en alguna de nuestras carreras.

 

Detrás del Challenge

Para darle vida a este desafío, participaron en coordinación profesores, staff y profesionales invitados.

La moderación del evento estuvo a cargo de Teresa Bosch, directora ejecutiva del Austral World Building Lab, y del cofundador del laboratorio Ignacio Trossero. También trabajaron en la organización del cierre la profesora Florencia Aguilar (también cofundadora del Austral World Building Lab), el profesor Diego Coletta y Marta Mercau Menéndez, del área de Admisiones de la Universidad Austral.

El jurado contó con la participación de profesores, graduados e incluso con la participación de una alumna de nuestra Facultad. Esteban Pittaro, director de estudios de la Licenciatura en Comunicación; María Sánchez, directora de estudios de la Licenciatura en Diseño; y Lucila Frugoli, alumna avanzada en la carrera de Diseño y participante del proyecto Junk Consortium.

Impacto

Olivia

Alumna del equipo ganador, Las Replicantes, del colegio El Buen Ayre (Buenos Aires).

“Me llevo de esta experiencia un renovado aprecio por el poder de la creatividad y la importancia del trabajo en equipo. Disfruté mucho del proceso que vivimos con mi grupo. Desde un principio, estábamos entusiasmadas por incluir todas las ideas que nos iban surgiendo. En el camino tuvimos varios desafíos: nos costó decidir qué ideas tomar y cuáles dejar pasar, ponernos de acuerdo en cada detalle, y el manejo de los tiempos de cada una. Más allá de estos obstáculos, la verdad es que armar un mundo entre cuatro personas nos acercó sin duda como amigas, y nos enriqueció, al encontrar cada una un rol indispensable en este proceso.

La metodología de World Building me ayudó a entender realmente las bases que se necesitan para conformar un mundo, y lo importante que es cada una para que haya coherencia y sea atractivo para un espectador. A su vez, siento que me abrió la cabeza a posibilidades infinitas de mundos imaginarios, a los que espero algún día poder dar forma como logramos hacer con las chicas”.

 

Diana Córdoba

Productora ejecutiva de Wacom Tabletas DC•DC!, el Canal Oficial de Wacom en la Argentina, y productora de animación en DC•DC Digital Contents.

“Estoy muy agradecida por haber participado en el evento donde alumnos del último año de secundaria crearon y desarrollaron ideas sobre las ciudades del futuro. Todas las propuestas fueron distintas y me sorprendieron por la planificación, el diseño y un pensamiento que resaltó los valores humanos, el respeto por las especies y la tierra, la tecnología como herramienta y el amor como necesidad para la buena convivencia.

Considero que estas iniciativas son necesarias: permiten un trabajo creativo, colaborativo y en equipo entre profesores y alumnos. Este evento me ha dejado la esperanza de saber que los jóvenes están interesados por el futuro de la sustentabilidad y la ecología como parte del desarrollo urbano. Muchas gracias World Building Challenge y todo su equipo”.

 

 

Stefano Carluccio

Director regional de contenido y reputación de Responsabilidad Social para DirecTV Latinoamérica.

“La razón por la que apoyamos al World Building Challenge a través de nuestro programa Faciuni-que es un espacio de relacionamiento con la comunidad del cine y, sobre todo, con los estudiantes del cine- es porque estamos convencidos de la importancia de dejar un legado cultural, de apoyar la herencia cultural local a través de las historias que se cuentan en el cine y otros espacios.

Por eso es tan importante invertir, desarrollar y difundir espacios que potencian a la próxima generación de contadores y creadores de historias.

Además, tuve la oportunidad de participar en la final, y verdaderamente fueron de muy alto nivel, digno en una final. Así que estamos muy contentos y con mucho entusiasmo de poder continuar apoyando estos espacios y estas metodologías que les permiten a jóvenes estudiantes potenciar su creatividad, desarrollar nuevas historias y también aportar posibles soluciones a conflictos que tenemos, tanto sociales como ambientales”.

 

Ignacio Trossero

Cofundador del Austral World Building Lab, profesor de la Facultad de Comunicación y moderador del evento, junto a Teresa Bosch.

“Fue una oportunidad para que alumnos que están interesados en carreras como Comunicación y Diseño puedan expandir sus horizontes creativos. Y, cuando hablo de creatividad, me refiero a creatividad colaborativa, que lleva a hacerse preguntas de índole muy profunda.

Consideramos de importancia educar a jóvenes secundarios en temas de World Building: les damos herramientas para que puedan crear mundos futuros, pensando sus reglas y las condiciones en las cuales se vive.

Para el final del proceso los alumnos pudieron combinar Diseño, porque usaron herramientas de ilustración y diseño también para hacer visual el mundo; storytelling, para contar las historias que viven en ese mundo y cómo se relacionan entre ellas; y, por último, utilizaron la tecnología, eligiendo el mejor soporte para poder contar ese mundo y las historias. Algunos hicieron presentaciones orales, otros visuales de cada personaje y otros videos”.

 

Karin silbert

Wacom Training Specialist.

“Fue un orgullo haber sido convocados por la Universidad Austral para ser parte, aunque haya sido solo un granito de arena, del World Building Challenge.

Emocionante ver la dedicación y creatividad con que cada grupo de jóvenes presentó sus proyectos. Bien merecidos fueron los premios para los seleccionados».

Trabajar en equipo. Poner lápiz y pantallas a la obra. Imaginar el futuro. Mirar con otra perspectiva el presente. Cuatro objetivos cumplidos gracias al World Building Challenge.