Alfonso SantiagoB

 

El Dr. Alfonso Santiago, director de la Escuela de Gobierno de la Universidad Austral, fue consultado por La Nación sobre el uso de Decretos de Necesidad y Urgencia.

 

 

 


 

Macri firmó más DNU que en el primer período de Cristina

Sin embargo está muy lejos de Néstor Kirchner, el presidente que más usó esos instrumentos.

Mientras el reciente megadecreto presidencial sigue sumando rechazos y la oposición promete encender el debate en el Congreso, un dato salió a la luz: en dos años de gestión, Mauricio Macri ya dictó más decretos de necesidad y urgencia (DNU) que Cristina Kirchner en su primera presidencia.

La información surge de un relevamiento llevado adelante por el Ministerio de Justicia sobre los DNU publicados en el Boletín Oficial desde 1983.

Así, a pesar de haber dictado 82 DNU en sus dos mandatos, la ahora senadora solo firmó 33 en su primera presidencia. Por su parte, el líder de Cambiemos y su gabinete llevan a la fecha firmados 35 decretos.

Los especialistas consultados por la nacion coincidieron en señalar que a lo largo de los años el Poder Ejecutivo hizo un abuso manifiesto de esta facultad. Desde 1983 hasta hoy se firmaron un total de 860. La Corte Suprema declaró varios de ellos inconstitucionales, pero nunca el Congreso llegó a derogar uno con el rechazo manifiesto de ambas cámaras, requisito establecido por ley.

Por mandato, quien dictó más decretos de necesidad y urgencia fue Néstor Kirchner, con 239.

La lista sigue con la primera presidencia de Carlos Menem, durante la cual se llegaron a firmar 177; Eduardo Duhalde, con 155; Menem (segundo mandato), con 105; Fernando de la Rúa, con 59, y el segundo ciclo de Cristina, con 49.

Tanto Alfonsín como Menem hicieron uso de esta prerrogativa presidencial sin que estuviera reconocida en la Constitución, solo con el aval de la jurisprudencia.

La reforma constitucional de 1994 incluyó en las atribuciones del Poder Ejecutivo la posibilidad de emitir DNU «cuando circunstancias excepcionales hicieran imposible seguir los trámites ordinarios».

Recién en 2006 se sancionó una ley para regular «el trámite y los alcances de la intervención del Congreso respecto de los decretos que dicta el Poder Ejecutivo», que creó la comisión bicameral y reguló el proceso de derogación a partir del rechazo de ambas cámaras.

«Si se hubiera obligado a que las cámaras se expidan, sería un sistema más restrictivo. Pero se eligió el sistema más permisivo posible: el silencio. El Poder Ejecutivo controlando el silencio de una de las dos cámaras puede gobernar sin problemas», dijo a La Nación Santiago Alfonso, constitucionalista y profesor de la Universidad Austral.

La ley, sancionada en 2006, fue diseñada por la entonces primera dama y senadora Cristina Kirchner, quien preparó así el terreno para su futura presidencia.

«Hay una distorsión institucional. La Constitución quiere que las leyes salgan después de un debate público y participativo. Muchas de las decisiones que tuvieron más impacto en la sociedad argentina no salieron por donde deberían haber salido», sostuvo Alfonso.

Causas y motivos
En la misma sintonía se expresó el constitucionalista Jorge Vanossi. «La cuestión a discutir no es el uso, sino el abuso. Mientras un proyecto de ley es un mecanismo republicano y transparente, un DNU implica la política de hechos consumados: no hay posibilidad de modificarlo. Se usa para evitar el debate», dijo.

Para el politólogo Facundo Cruz, la clave de la motivación para emitir un DNU pasa por la relación entre el presidente y el Congreso. «¿Cuál es el problema que tiene Macri que superó a Cristina? Los DNU se usaron cuando hubo cambios de ciclo porque traen aparejados cambios del modelo económico y del funcionamiento del Estado; Cristina siguió con un ciclo y aprovechó la relación de fuerzas favorables en el Congreso», explicó el politólogo.

«Menem utilizó un montón de DNU porque cambió el modelo económico. Duhalde tuvo que implementar la salida de convertibilidad. Néstor Kirchner entró en conflicto con el duhaldismo y utilizó los DNU para mostrarse más fuerte que el Congreso. Es una situación parecida a la que tiene Macri, que no tiene mayoría. Para no pagar el costo de negociar y desgastar la relación con el Congreso emite DNU», sostuvo Cruz.

La tentación de tomar el atajo del DNUEn la Constitución desde 1994, regulados en 2006.

  • Néstor Kirchner: 239
  • Carlos Menem: 177 (Primer mandato) 105 (Segundo mandato)
  • Eduardo Duhalde: 155
  • Fernando de la Rúa: 59
  • Cristina Kirchner: 33 (Primer mandato) 49 (Segundo mandato)
  • Mauricio Macri: 35
  • Raúl Alfonsín: 2

Por: María Belén Álvarez Echazú