El dolor se presenta muchas veces como un despertador para las preguntas filosóficas. Bien puede decirse que el dolor es una incómoda manera de volvernos filósofos. Hoy nos encontramos todos colectivamente asaltados por los mismos interrogantes filosóficos. Las preguntas aburridas que uno encontraba en el libro de filosofía se transforman en dolorosos dilemas con los que la vida nos enfrenta.

Compartimos con ustedes la reflexión filosófica de Mariano Asla sobre el momento de incertidumbre que vivimos todos en esta pandemia de COVID-19.

Filosofar en tiempos de incertidumbre